Como los
fragmentos
que se han roto



Exposición de Alicia Arévalo y Lucas Marcos Barquilla
20.05 - 30.06.2023
Malpaís. Artist-run space, Barcelona

Una historia de cuerpos que se rompen y los fragmentos se pueden recombinar. La exposición se configura como un yacimiento de cuerpos múltiples, corazas, costras en descomposición, híbridos entre organismos y otros restos en proceso de mutación.

La intención de recombinar materialidades, flujos de energía y temporalidades está presente en toda la sala. Existe en los mapas, imágenes y exoesqueletos de cerámica de Lucas, creando estructuras sobre las bandejas, pizarras y pantallas de luz. Alicia genera nuevas composiciones con pedazos de bioplásticos rotos que brotan en las paredes de la sala como cuerpos “otros”. En sus diferentes condiciones físicas convive la humedad, aquello que al mojarse se reblandece y al secarse se convierte en costra y se solidifica. El vinagre que sana la herida abierta del barro y estabiliza el polímero para que cure. La fragilidad y la contaminación que arrastran sus procesos de producción dentro de un espacio aséptico de estudio, observación y archivo.


Xerosis III, 2023
Metal, Agar agar, glicerina, vinagre, agua, flor, conchas, pelo


Detalle de Xerosis III, 2023

Mitty II, 2023
Vidrio, maicena, glicerina, vinagre, agua, arándano, flor, conchas, pelo


Xerosis II, 2023
Agar agar, glicerina, vinagre, agua, flor, conchas, pelo



Mientras nuestros cuerpos estaban inmersos en el proceso indefinido de cambio y adaptabilidad propio de nuestros entornos hiperactivos, su capacidad flexible empezó a ceder y romperse. Una ruptura para que la carne (lo blando) y la emoción (lo blandito) se adaptasen a un presente marcado por la precariedad, la inestabilidad y el corto plazo. Tras ver las primeras fracturas, el cuerpo, ya mostrando su fragilidad, empezó a intentar sostenerse por toda una serie de exoesqueletos que le permitiesen continuar siguiendo el ritmo. Emergieron criaturas blandas y pegajosas. Eran seres antiguos de la tierra que condensaban las diferentes materialidades y formas de vida existentes. Estos nuevos seres húmedos, llenos de restos, caparazones y cabellos desenmarañados, retozaban en un humus multibichos. Son monstruos de última hora, pedazos de pieles muertas tomando vida de nuevo.


Sin título, 2023
Cristal, hongo del té, maicena, té verde, agar agar, glicerina, vinagre, agua, arándano, naranja



2023
Vidrio, maicena, glicerina, vinagre, agua, flor, conchas, pelo


Mitty, 2023
Plancha metálica, maicena, glicerina, vinagre, agua, arándano



Como los fragmentos 2023
Maicena, glicerina, vinagre, agua


Fotografías por Andrea Carilla

Alicia Arévalo ha realizado esculturas con biomateriales que funcionan como costras, pieles y fragmentos vivos. Son criaturas híbridas y pegajosas. Realiza una exploración con la materia: por un lado, la descomposición de los bioplásticos y, por otro, la proliferación de hongos y organismos. Serán piezas vivas que irán mutando durante el tiempo de duración de la exposición. 

Los bioplásticos son derivados de elementos vegetales como maíz, algas y frutas que se mezclan en una amalgama de fluidos, pelos, conchas marinas, restos de flores y plantas. Están en una constante desintegración. Dicho proceso es más evidente en los frascos de cristal en los que el agua está acelerando la descomposición de los polímeros. En el tercer frasco de cristal está sucediendo el proceso contrario, hay un hongo del té que está haciendo crecer nuevos organismos de celulosa a modo de pieles vegetales.